Crea un enfoque diferente en tu vivienda con los cerramientos de terrazas y de áticos acristalados, podrás mantener unas vistas espectaculares y crear espacios únicos manteniendo la amplitud de tu terraza libre de los ruidos exteriores y de los cambios climáticos, que nada te impida disfrutar del exterior. Ni el frío, ni el calor, ni la lluvia, ni el viento… ¡nada se resiste a las terrazas acristaladas!
Es una forma magnífica de aprovechar las terrazas, aquellas que normalmente vemos limitada solo al uso en el buen tiempo.
Es una opción muy usada sobre todo en los áticos, esto se debe a que al poseer una amplia terraza, con el tiempo somos conscientes de que a esta parte de la casa a penas le damos el uso que requiere. Mientras que si la cerramos podemos contar con este espacio durante todas las etapas del año.
Son muchos los chalets de lujo en Sitges en los que podemos encontrar grandes terrazas acristaladas, donde los dueños de las casas pueden disfrutar de desayunos en pleno jardín sin estar expuesto a las inclemencias del tiempo.
Ventajas de convertir tus terrazas en terrazas acristaladas
1º Pon fin al ruido. Podrás disfrutar del espacio exterior de tu terraza pero siempre aislado de los ruidos que nos llegan lo cual es una gran ventaja. Cuando tenemos una terraza queremos disfrutar de ella, es nuestra zona de confort, donde leemos y donde descansamos, pero cuando tenemos ruido exterior no acabamos aprovechándola como debiéramos.
2º Un espacio más amplio. Cuando tenemos una casa con la terraza acristalada le damos más uso al espacio, puesto que esta parte de la casa solo suele ser utilizada durante el verano o la primavera. Cuando contamos con una terraza acristalada aprovechamos este espacio para un montón de cosas independientemente del tiempo que haga en el exterior. A su vez nos da la posibilidad de tener una habitación extra dentro de nuestro domicilio.
3º La limpieza. Es indudable que tener la terraza acristalada aísla nuestra casa también de la suciedad que pueda entrar del exterior. Es cierto que los cristales pueden convertirse en un incordio a la hora de limpiarlos, al menos hasta que no nos acostumbremos a ellos y a los productos que nos lo dejen impecables. Pero verás que con el tiempo la casa tendrá menos polvo y menos suciedad como las hojas que puedan entrar del exterior.
4º La tranquilidad. Tener una terraza acristalada también aporta tranquilidad a los habitantes de la casa. Se convierte en una zona más segura y hace que el interior de la casa sea menos accesible para los posibles intrusos que quieran entrar en nuestro espacio.
5º La privacidad. Al igual que evita que entre el ruidos del exterior, también los ruidos de nuestra terraza estarán aislados del exterior y de los oídos intrusos. De esta manera tendremos mayor intimidad si estamos en nuestra terraza charlando, sin tener que preocuparnos en que el vecino pueda estar escuchando nuestra conversación.
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